Los Yolis después de las fotos de Olkar Ramírez

Los Yolis después de las fotos de Olkar Ramírez
La foto que más me gusta (Doris Night, Tino Tinto, Divina Gloria, Dennis Pannullo y Ben Gala)

sábado, 15 de mayo de 2010

El desembarco galo (Pura ficción. Cualquier similitud con hechos reales es mera coincidencia -¿o no?-)


Nadie se explicará jamás los motivos que impulsaron a los galos Michelix y Jeanfrancingentorix a atravesar el peligroso océano para venir a este páramo cultural cuando el proceso seguía su curso y travestirse era prohibido por ley con una cláusula antiputo conocida como 2H.
Unos dicen que amigos poderosos los apoyaban, otros que habían tejido maliciosas redes con altos productores y fuertes alianzas con ricos artistas exiliados, y no faltó quien los acusara de relaciones carnales con algun diplomático de turno. En cualquiera de los casos, y reconociendo que todos los motivos suenan en el fondo bastante parecidos, la antiquísima institución del mecenazgo les cayó como anillo al dedo y llegaron a estas pampas quemando las naves.

Ese era el principio del fin de cualquier movimiento teatral local nonato que coincidiera en algún aspecto con las obras que éstos artistas foráneos representaban.
La técnica milenaria de los extranjeros, heredada por sangre luego de cien generaciones de conquistadores, fue tan simple como siempre lo había sido y tuvo el mismo éxito que siempre había tenido: divide y reinarás. Y si no puedes derrotarlos, alíate.

Los Peinados Yoli no debimos ser víctimas de esta conspiración. Pero hacíamos playback. Pero nos travestíamos. Pero estábamos surgiendo con mucha bulla en el horizonte teatral. Pero nosotros nos reíamos de sus caviares con nuestro “Crepúsculos de Salmón”. Pero estábamos jodidos.

Es que era tan adorable ver a los franceses y su corte entre nuestro público cuando venían a los pubs luego de sus propias funciones, que no nos dimos cuenta de que por ahí se venía la noche. El sistema, que no había podido silenciarnos, nos había atacado con un arma de última generación. Era el principio del fin y muy, muy al principio.

Michel Delhaye y Jean Fracasanovas se pelearon tibiamente por todos y cada uno de nosotros durante un largo año.
Con la única excepción de Gloria, que ya era portadora de fama individual, Fracasanovas (un talento mayúsculo, un ego inabordable, una femineidad inalcanzable) fue más paciente y ganó la contienda peleando las batallas de a una.
Aunque tuvo que ponernos en el cartel como LOS PEINADOS YOLI en la presentación de Piano Bar, nunca más cedería un milímetro de terreno. El estratega dispuso que a partir de entonces seríamos caviar o nada y sin seudónimos Yoli. Debíamos figurar en los programas con nombres reales, pero saludar al público con peluca.

Alegría tras alegría todos partiríamos del lado del europeo y la alarma de control de daños sonó con diferente intensidad en cada caso
Él francés vive y nosotros, los que sobrevivimos (no a él sino a nosotros mismos) también. Los diplomáticos han fallecido junto a los muertos.

2 comentarios:

  1. ME ENCANTOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!TE MANDO UN BESO DORITA, TENGO MUY BUENOS RECUERDOS TUYOS...TODOS BUENOS...HUBIERON MALOS, CREO, PERO NO LOS RECUERDO, TE MANO UN BESO MÁS.

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  2. conociendo a los protagonistas de esta obra, y habiendo soportado la opresion-obsesion-perversion Pachanezca, es mejor haber sobrevido, que seguir viviendo asi. Un abrazo para todos deleitantesdelirantes PERSONAS.

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